martes, 22 de septiembre de 2009

121.- La ya histórica gran mentira.

Este post no pretende iniciar un debate sobre si la energía nuclear es buena o mala, peligrosa o no peligrosa, necesaria o no necesaria. Solo pretende, que los ciudadanos extremeños conozcan otra teoría del porqué se cerró la Central Nuclear de Valdecaballeros. Teoría que en aquellos tiempos podría haber sido un cuento chino, pero que a lo largo del tiempo toma cuerpo cada vez mas, a la vista de los acontecimientos que se produjeron entonces a nivel nacional, y los que se están desarrollando actualmente en nuestra región, referente al tema energético.Rodríguez Ibarra apodado ya el 1º Virrey Extremeño, fue el artífice del cierre de estas instalaciones, cuando hace ya 30 años organizó en Villanueva de la Serena y en contra de la central de Valdecaballeros, la manifestación más multitudinaria, que jamás se haya celebrado en Extremadura, con bocadillos y autobuses gratis para todo el mundo. Algunos todavía podemos recordar a aquellos 100 alcaldes, que se encerraron en el Ayuntamiento de Villanueva para protestar por el cierre de dicha central.
Al final lo consiguió, esgrimiendo razones ecológicas, medioambientales, de seguridad y aquello de que “a Extremadura solo nos dan lo que no quieren los demás”. Con estos argumentos logró movilizar a mucha gente, para que secundaran la protesta y así hacerla más fuerte ante la opinión pública.
Bueno, pues muchos pensamos, que las verdaderas razones por las que este tío montó todo este festival y por las cuales se cerraron estas instalaciones, fueron para hacerle el trabajo sucio al gobierno de Felipe González, cuando se tuvo que inventar el parón nuclear, para poder cerrar la Central Nuclear de Lemoniz, y no dar la sensación de que el gobierno español había cedido ante el chantaje que ETA estaba haciéndoles en aquella época, para que cerraran Lemoniz. La presión que ejerció ETA con el asesinato del Ingeniero Jefe de Lemoniz, y las numerosas bombas que estallaron dentro del recinto de la central asesinando a trabajadores, fue brutal.
Hoy en día se puede asegurar, que si este chantaje de ETA no hubiera existido, no hubiera habido ningún parón nuclear en España.
Se sabe que estos tíos tiraron a la basura casi 800.000 millones de pesetas de la época, por paralizar los dos reactores de Lemoniz prácticamente terminados, y los dos de Valdecaballeros, el cual en un año hubiera entrado en funcionamiento su reactor 1.
En cambio permitieron que Vandellos II y Trillo I, entraran en funcionamiento 4 o 5 años después.
Con esta maniobra nos condenaron a pagar a todos los españoles, creo que hasta el año 2025, unas suculentas indemnizaciones a las eléctricas, que se podrían elevar al final hasta los 7.200 millones de euros.
Si esta teoría no es cierta, ¿como es que el mismo Rodríguez Ibarra, su sucesor en el Virreinato y su partido político en bloque, hayan cambiado tanto y pretendan ahora montar en Extremadura tres Centrales Térmicas en las cuales se van a quemar gas natural y fuel para producir energía y además una Refinería de petróleos?
Me puede alguien explicar, ¿porqué ahora sí, estos mismos tipejos, quieren montar en Extremadura industrias que nadie quiere? ¿dónde quedó ese carácter ecológico y medioambiental, de los que siempre han presumido?.
¡Ah! Y hablando de seguridad para los ciudadanos, ¿porqué estos mismos que hicieron aquel paripé, permitieron que la mina del Lobo en La Haba, se convirtiera en un cementerio clandestino de residuos nucleares?
Léase el post: http://almendralejo.cuadernosciudadanos.net/Qatsi/2007/08/13/36-el-cementerio-clandestino-de-extremad/
Y encima en aquella época y para rematar la faena, los trabajadores extremeños de la central de Valdecaballeros tuvieron que aguantar de todo, debido al clima tan beligerante que crearon estos mismos buscavotos. Casi era mejor no decir que trabajabas allí, por si las moscas. Cuando el único pecado que cometieron estos trabajadores, fue buscarse un trabajo en aquellos tiempos en los que la tasa de paro rozaba el 20% a nivel nacional, y encima al final no tuvieron más remedio que emigrar de Extremadura para buscarse la vida.
Y encima, ese supuesto sacrificio que hicieron por el bien común de todos los extremeños, nunca se lo llegaron a reconocer.
Todos sabemos, que para esos extremeños de bien, que apoyaron aquellos festivales, pensando que defendían unos ideales y una forma de vivir, sea muy difícil ahora comerse este sapo, y tampoco se pretende que se lo coman, porque puede comprenderse que fueron manipulados y engañados hasta las trancas. También es cierto, que intentar comerse este último sapo puede ser aún peor.
Qatsi.
Viñeta de El Roto.

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