El informe de Pepe Gotera y Otilio.

Debido a los malos olores que se registran casi todos los días en Almendralejo, se encargó un informe para medir la calidad del aire, y ahora resulta que se dejan en casa los instrumentos para medir esas sustancias malolientes. Por supuesto, que las chapuzas de Pepe Gotera y Otilio eran más divertidas. Estos tíos tienen menos porvenir que un espía portugués. Me gustaría saber quien encargó el informe y quien eligió los aparatos para medir. 

¡Que bochorno papi!, me dije, después de leer lo más sustancial de este famoso informe, y del cual os transcribo literalmente el artículo 8 de su resumen, el cual dice:  

8.- La existencia de episodios de malos olores en la ciudad, es presumiblemente debida a la presencia en el aire de trazas de otras sustancias gaseosas, que "NO HAN PODIDO SER DETECTADAS CON LOS INSTRUMENTOS DE MEDIDA EMPLEADOS EN EL ESTUDIO". Si bien son evidentes las molestias y trastornos que estos episodios de malos olores causan a la ciudadanía, los datos experimentales recogidos durante las campañas de medida, muestran que los umbrales límite de concentración de contaminantes atmosféricos marcados por la legislación para la protección de la salud humana, no se han superado en la ciudad durante el periodo estudiado. 

¿Podremos saber algún día si estas sustancias malolientes, que no han sido medidas, están dentro de los límites legales permitidos? Creo que estos no tienen muy desarrollados sus sistemas olfativos, deberíamos de contarles el chiste del "superpedo", que a lo peor ni lo saben:  

Doctor, me pasa una cosa muy extraña. Tengo unas ventosidades impresionantes, pero son absolutamente inodoras. 

- ¿Cómo dice?  

- Pues que me tiro unos pedos que hacen un gran ruido, pero no huelen nada. 

- A ver, tírese uno. Efectivamente, el ruido es estruendoso. Los cristales de la consulta vibran. 

- Es muy grave. Hay que operar inmediatamente. - ¿Del trasero? 

- No, de la nariz.  

Míralo, igualico, igualico que el médico que tuvimos anteriormente de alcalde, cuando decía que no había problemas para la salud, por la ingestión de simazina a través del agua insalubre que bebíamos en esas fechas. 

¡Jope! Y eso que era médico.  

En dos palabras "in" "presionante".  

Qatsi.