domingo, 26 de diciembre de 2010

181.- El discurso navideño de un nuevo pobre.

Si eres rico, llévate a cenar a tu casa a un pobre inmigrante el día de Nochebuena, y si es rumano mejor, al igual que Luís García Berlanga sugirió en 1961 con su película “Plácido”.
Yo he estado a punto de hacerlo, invitando a un miembro de una penosa familia, cuando escuché a su cabeza de familia realizar el siguiente discurso por televisión:
¡Españoles!
Fran………………erto.
Perdón, se me ha ido la olla. Este no es el discurso.
Debido a la crisis que estamos padeciendo, este año os pido un poco más de comprensión hacia mi familia, y hacia las familias que viven en mi misma situación. La crisis, el paro, las drogas, la inmigración, se han instalado en mi casa definitivamente para quedarse. Por eso os pido, que para este año nuevo os exprimáis un poco más y desarrolléis dosis extras de comprensión hacia mi familia, porque nuestra situación roza ya unos límites insostenibles, y alarmantemente insoportables.
Como ya sabéis soy hijo de exiliados, y hasta que no cumplí los 27 años, y un poco antes de la transición, no pude volver a España por culpa de Franco.
A mi padre, pobrecito, cuando murió no sabíamos ni dónde enterrarlo.
Mi madre, la pobre, estuvo muchos años en silla de ruedas.
Ahora tengo 70 años, y hace unos meses me sacaron el 30 % de uno de mis pulmones.
Mi mujer, no es rumana, pero si es inmigrante.
Tengo tres hijos con ella.
De los tres sólo trabaja una, la del medio,... pero no cobra nada.
Todos, incluidos los nietos, viven de mi asignación.
La mayor se acaba de divorciar.
Mi yerno se daba a las drogas y al alcohol y la ha dejado con dos niños.
El pequeño de mis hijos aún no se ha ido de casa y además se ha casado con una divorciada y la ha traído a vivir con nosotros.
Esa señora antes trabajaba, tenía muy buen puesto, pero desde que vino a mi casa ya no hace nada.
Ahora tienen dos niñas que también viven bajo nuestro techo.
Y para colmo este año, con lo de la crisis, casi no nos hemos podido ir de vacaciones y si me apuras... ni he podido celebrar que España ha ganado el Mundial.
Espero que os sigáis apretando todavía más el cinturón, para que mi familia, y todas las familias que están en mi misma situación puedan seguir viviendo con dignidad.
El cámara que estaba grabando este discurso, se queda totalmente atónito y con los ojos haciéndole chiribitas comenta:
¡¡Pero hombre Majestad, no creo que su situación sea tan mala!! ¿no?
Qatsi.
La viñeta la he tomada prestada de http://www.eleconomista.es/blogs/vineta-del-dia/?cat=137

No hay comentarios:

Publicar un comentario