72.- El petróleo: Lo tenemos crudo.

Siempre se ha dicho, que la ciencia y el transcurrir del tiempo son los principales responsables de dar o quitar la razón a las personas.
Digo esto, porque desde hace 30 o más años estoy escuchado a unos pocos, calificados como agoreros por la mayoría de nuestra sociedad, que se comenzara a pensar en depender lo menos posible del petróleo. Que se buscaran otros medios energéticos. Que esta "mierda del diablo" como le denominan los pobres africanos, acabaría por desestabilizar a toda la sociedad occidental, debido a la excesiva dependencia, que hemos ido acumulando durante los últimos tiempos, cual si fuera una droga. Ahora comprobamos que el tiempo les ha dado la razón a estos agoreros, los cuales basaban sus conjeturas en que la mayoría de este maldito oro negro, estaba y sigue estando en manos de países muy inestables, y que incluso algún día nos podrían hasta chantajear con cerrarnos el grifo.
Fijaros el caos, que se originaría en casi todo el mundo, si un día se le inflaran los polvorones a Irán y le diera por bloquear el estrecho de Ormuz, por donde transitan 17 millones de barriles de petróleo diarios, o sea alrededor del 20% del suministro mundial.
Fijaros también, que casi todos los conflictos armados que se han originado en los últimos tiempos, tienen como trasfondo el petróleo, aunque algunos se empeñen en desviar nuestra atención y hacernos mirar hacia otro lado, para así poder disfrazar los conflictos esgrimiendo otros motivos, o ¿todavía nos vamos a seguir creyendo, que la culpa de la invasión de Irak la tenían las inexistentes armas de destrucción masiva?
El último informe del Instituto Internacional de Investigación para la Paz en Estocolmo (SIPRI), afirma que la importancia estratégica de las regiones ricas en reservas de petróleo y de gas, sin duda, aumentará. No sólo Oriente Medio, sino también África, Asia Central, América del Sur, y el sureste de Asia serán potencialmente zonas de conflicto en las décadas venideras.
En el año 2001 el precio del barril de petróleo estaba en 18 dólares, en el 2002 subió hasta 29 dólares, en el 2004 alcanzó los 50 dólares, en 2006 se lanzó hasta los 70 dólares, y actualmente está a 130 dólares el barril, y los agoreros de ahora pronostican, que no parará de subir hasta que llegue a los 200 dólares el barril, y a esperar que pare ahí. O sea, que en 8 años el barril de petróleo ha subido un 625 %.
¿Qué pasará con nuestra economía cuando el barril de petróleo alcance los 200 dólares?
¿Estamos seguros de que el dinero de estas bestiales subidas del petróleo, no se destinan para financiar redes de terrorismo internacional?
¿Cuantos inocentes seguirán muriendo en los conflictos armados, originados por el petróleo?
¿Seguiremos teniendo estómagos, para seguir consumiendo petróleo mezclado con sangre?
¿Contribuiremos a aumentar las riquezas de los más ricos, y hundir aún más en la miseria a los más pobres?
¿Para fomentar una política de ahorro, habrá que crear granjas de desintoxicación de conductores, para vencer la adicción al volante?
¿Cuando se va a progresar con seriedad en el desarrollo de combustibles alternativos para el transporte?
¿Se sabe de verdad, cuales son las reservas reales de petróleo en el mundo?
¿Podremos confiar en que estos países inestables, nos van a seguir suministrando petróleo?
¿Cuando van coger nuestros gobernantes el toro por los cuernos, y desarrollar una eficaz política energética a largo plazo?
En definitiva, la crisis del petróleo la tenemos ahí, y lo que arrastra esta situación también, y aquí en Extremadura el medico, el cura, el farmacéutico, el maestro, el perito, y el alcalde del pueblo, siguen empeñados en refinar este producto, el cual debería de ir pasando poco a poco al cortijo de los obsoletos, como nos recomendaron hace ya muchos años esas personas, que en su día fueron catalogadas como agoreros por unos estúpidos ignorantes, que no supieron, o a lo peor no quisieron prever esta realidad. Actualmente podemos comprobar que la estupidez, sigue insistiendo.
Qatsi.